08 de Abril del 2016
El temor al desempleo incrementa el 'presentismo' laboral
- La incertidumbre del empleado genera el fenómeno del "presentismo laboral".
- Consiste en alargar la jornada laboral para aparentar mayor volumen de trabajo.
- Expertos consideran que esta nueva práctica afecta a la salud de los empleados.
En los últimos años la crisis ha acrecentado en el panorama laboral un curioso fenómeno que muchos lo padecen sin ser conscientes de ello en la mayoría de los casos.
El llamado 'presentismo laboral' es una tendencia consistente en alargar la jornada laboral para aparentar un mayor volumen de trabajo por el miedo a una posible pérdida del
El en España superó en diciembre por primera vez la . Una situación que ha dado lugar a que muchos trabajadores en activo sufran cierta preocupación e incertidumbre por lo que pueda pasar en un futuro inmediato.
Menos absentismo laboral
Ahora lo que más preocupa es mantener el puesto de trabajo y hacer todo lo posible por no perderlo. Algo que ha propiciado no solo la reducción del absentismo laboral y el número de ausencias injustificadas, sino que ha disparado incluso una actitud contraria pero no menos extrema de ir a trabajar aunque existan causas para no hacerlo.
Hasta el punto de que personas enfermas eviten acudir al médico o solicitar partes de baja ante el temor de que otros candidatos les arrebaten lo que es suyo.
Los expertos consideran que vivir bajo esta presión, además de poner en peligro la salud del propio trabajador, lo único que genera es un clima laboral enrarecido que no ayuda para nada en la mejora de resultados. Así lo considera Maite Gutierrez, responsable del área de psicología de Más vida red.
El empleado que sobrepasa su horario laboral con la única finalidad de que se note su presencia en la organización, no es precisamente el más productivo. Ese sobreesfuerzo innecesario puede generar repercusiones negativas en el ámbito personal del individuo que tarde o temprano salpican y empeoran también el entorno laboral.
A pesar del esfuerzo de muchas empresas por transmitir seguridad entre su plantilla y fomentar un entorno favorable en el que se sientan cómodos para desarrollar su trabajo, el crítico panorama económico y social en el que nos vemos envueltos ha propiciado este especie de epidemia psicológica.